Sandalias del Olimpo



Spotify | Google Play Music | Apple Music | Bandcamp | CD Baby

Francisco Murillo grabó voces en "San José"
Manuel Sosa grabó el bajo de "Atlanta"
Joel Brene grabó la percusión en "Atlanta"
Gabriel Valdivia grabó el bajo en "Tampa" y co-produjo el album.
Alex Valdivia hizo el resto.






Sancti Spiritus


Sancti Spiritus le cierra la puerta a su ciudad
con agua del rio irá a lavar los pies del viajero que va a llegar
Siempre un paso atrás se inventa en el aire una amistad
calor con resfrío y luz de vitral, portales vacíos mirando el mar

Cubre su niñez con el mosquitero de recordar
ojos de taíno y paz del hogar en cada vidriera
Suelta su canción y no hay una esquina para escapar
de su voz de pino entre las palmeras

Sancti Spiritus le debe su nombre a tu caridad
se viste de trinos cuando le subes por las aceras del boulevard
Siempre el corazón descansa en el parque, tomando el sol
de todos los martes, libando un ron que al fin se reparte entre su tensión

Ven a susurrar lo mal que te trata la situación
entre las mulatas y rockanroll que forran de latas
Escoge el arroz de su campana de torre mayor
túmbate a la orilla de su motor de narices ñatas

Sancti Spiritus es una perla salvaje
que te tiran por la borda
te mata, pero te engorda
No es una ciudad, es una fruta mordida
es sal para tus heridas
es una ola sin mar

Ven a caminar por calles de piedra sin bautizar
manchando el destino que llevaras de vuelta a tu tierra
pisa el diapasón del tres que tocara tu decepción
debajo del árbol que abandonó un tren en Colón

Sancti Spiritus es una perla salvaje
que te tiran por la borda
te mata, pero te engorda
No es una ciudad, es una fruta mordida
es sal para tus heridas
es una ola sin mar

San José


Pero qué feo era mi San José,
se me enredó en el aire que respiré,
del polvo de los pies en Plaza Mayor
a las colmenas pobres del corazón.

No supe nunca darle o quitarle el pie,
era un murmullo torpe que va en tropel.
Pero al seguirle el juego a su confusión
no conseguí borrarlo de mi canción
Allí me esperan mi casa y mi monte,
mi paz de horizonte, la voz del volcán,
el estadio y el humo adonde fuimos uno
cantando las canciones y la amistad

La tarde entera rondando los parques
a los que llegaste también sin pensar,
el sigilo y la espera guardando las carteras
en la bolsa que todos quieren cargar.

El bulto de los pasos del colegial
que escapa al cementerio para escuchar
la sinfonia absurda de hablarle a dios
y la lluvia en los techos de su ambición.

Qué jóvenes nos vimos en San José
con un brillo en el filo de no sé qué;
con un futuro a punto de desbordar
y babas de San Pedro mojando el mar

Si conociera su talla y su hondura,
toda su amargura, volviera a encontrar
Plazas de la Cultura, Urucas y Herraduras…
¡Marito Mortadella seria inmortal!

Y no tuviera canción qué cantarle,
como un navegante que nunca vio el mar,
y San José cupiera en la estrofa primera
de un viajero cantando a su fealdad.

Pero qué feo era mi San José,
se me enredó en el aire que respiré.

Tampa


Te tragaste al tipo aquél,
que alguna vez,
habló con el abuelo del cantor del pueblo.
Te tragaste a un corazón que,
del avión,
bajó con la ilusión de verse en tus espejos.
Consumiste la ansiedad acumulada en todos los vientos
de doscientos pueblos
– y de tus adentros –
te brotó un llanto que ahora,
cada vez que puedes,
muestras como un mandamiento.
No te creo eso.

Te tragaste a mi país,
aquí, la cicatriz que queda
se pasea por todos mis cuerpos.
Y me vi un dia,
sin fin,
difuminado en el ollin de tus vidrieras
y agua de tus puertos.

Y escupiste un hierro gris
Y disfrazamos a la emperatriz de la bahía de los huesos
Y el imperio, espeso, dijo:
“Todos son de aqui,
nada es de nadie
y todos están presos”

Tampa: un agujero negro
con cara de playa.

Tampa: una escopeta
que de pronto falla

Tampa: un souvenir
que en la maleta estalla.

Tampa: un día feliz
que se sabe tu talla.

Tampa: una casa de dulces
en el bosque.
Tampa es derrotero de todo sinsonte.

Tampa: pálpito que se quedó sin nombre.

Tampa: transito que desespera a dioses.

Te tragaste a Rafael,
nos diste un cáncer, como un juez,
te comiste a Fernando.
Te tragaste al rockandroll que oía yo.
Aquí murió Alejandro.

Devolviste una tiniebla de putrefacción
que parpadea a ratos,
que nunca cumple tratos

Cuando pienso,
a veces,
en volverte a ver,
pierdo equilibrios
y me duele el brazo.

Miami

Primero fue que, en Versalles,
un señor de pelo blanco,
con bermudas, guayabera
y chancletas en los zancos,
pidió un pollo a voz en cuello
(y según él, susurrando)
y el culo de la morena
que le trajo un jugo’e mango.

Pero aquí la cosa si que esta en candela, brother,
con el tacatá que el huracán no se llevó.
Y si sales a la calle el tráfico se siente joven.
Y otro bobo muerde, seducido por el sol.

Después la noche de trova,
Calle 8, embelezando,
con carteras y con lonas
de trova pura, trovando.
“Amor mío, no te vayas”
Todos crecimos cantándole
a una euforia engañadora
y a un zunzún altisonando.

La calle llena de peces
regalando sus espantos,
barnizando una certeza
de que hay algo de quebranto...
En fin, la música bella
y el neón oyendo el canto
del lunes, que se atropella,
allá en el fondo, esperando.

Y salir del vientre del Olimpo a los acordes
de un Uber que espera lo que sea que se cayó.
Sentir el calambre terco e inmisericorde
de la metralleta del patán del reggaetón

Discúlpeme, caballero,
aquí atras le estoy rogando,
bájeme usted ese avispero
que me taladra, gritando
Qué se yo con quién se queda
la señora de este canto,
no me importa su dinero
ni lo que él esté gozando

Si retumba, es su problema,
la cuenta me vengo dando
de que en toda esta odisea
la ciudad me está gritando:

Grita el semáforo en rojo,
grita el tonto de la radio.
Los viejitos, ¡cómo gritan
cuando hay jóvenes gritando!

Pero aquí la cosa si que esta en candela, brother;
la vida está cara y la propina no alcanzó
Si la gritería se amotina en los rincones
otro bobo muerde, ensordecido por el sol.

De la playa hasta el tsunami,
del hondísimo escenario
al vaivén de los salamis
Y al rubor de los acuarios

Viaja un sordo enloquecido
con el alma de origami
con un mantra como oídos:
“No me gustas en Miami”

Atlanta

Duerme, la calle entera duerme
y ha caído la nieve que iba a caer.
Sé que echaré de menos todos los pasos
que llevaron a ti

Vi tu cara serena cuando quemabas
mi casa entera,
Atlanta en pena.
Me diste un corazón que no era el mio.
Ella me tocó un dedo y me embriagó.
Como un esclavo entré por sus algodones,
plantaciones, lecciones

Atlanta, ajena,
murió de pena
el día que montamos en el camión,
abriendo venas
que Atlanta estrena.
El fuego del progreso que trae La Unión.

Me diste una canción de primavera,
¿cómo voy a negarte mi canto yo?
Di mis primeros pasos
y me dormí en sus brazos
de Atlanta buena que me arrulló

Siempre, sostener estas calles,
cuesta el brazo derecho del Niño Dios.
Nada me pesa más que estos corazones
que olvidarán mi nombre

Atlanta insomne,
nunca hay un hombre
que de a tus autopistas su devoción.
Y en ti se esconde,
sin saber donde,
la niña que esperabas.
¡Ya te nació!
Duerme, la calle entera duerme
y ha caído la nieve que iba a caer.
Sé que echaré de menos todos los pasos
que llevaron a ti

Jakarta

En Jakarta todo se toca,
lleva bien el dedo a tu boca
con la picazón del demonio
que, del polvo, armó un manicomio

Y calibra bien la balanza
que las calles andan descalzas.
Con sus motos y sus otoños
volverás a ser niño y ñoño

Y si el tráfico te atropella
al cruzar la fila de estrellas
de mezquitas con sus derroches,
mira a un solo lado en la noche

Ay Jakarta!
con tus medias blancas
tus ojos impares
tu luna y tus mares
No me tientes,
esconde los dientes,
que no todos saben
ingles en tus bares

Ay Jakarta!
Capricho que infarta,
tus intersecciones
son nudos y aviones
no me apartes
la piel de las artes.
Tendrás tus rincones
y yo mis versiones

En Jakarta esta la comparsa
entre las ruedas de los coches;
busca con espejos el brote
de los lujos entre barrotes

Y si el indonesio revisa
las bombas que trae tu camisa
échale la culpa a los soles
que te brillan en los charoles

Porque Bali está allá a lo lejos
y su multitud de cangrejos
se perfuman en los corales
que en Jakarta curan los males

Madrid

Alguna vez a Madrid
voy a tener que invadir
para colarme por sus historias y sus manías de vivir

Podría quedarme muy bien
probarme un rato su piel
engatusarme con sus euforias y sus modismos también

Del guajirito al gitanto no hay más que un paso y es chiquitico
y la colonia no es Macedonia si es progresiva la ceremonia
Si cae un rayo en medio de Europa, Madrid da el pecho y a quemarropa
Se pasa el año, sube peldaños y en San Francisco, cómo la extraño!

Alguna vez de Madrid
voy a sacar mi raiz
Por las terrazas come descalza mientras se ensalza sobre las brazas

Y nos veremos tal vez
tomando un vino burgués
Y con Sabina como bocina nos taparemos con las cortinas

Con las croquetas por Almudena se despedaza una calavera
y el extranjero suena sus cueros y por propina presta el sombrero
Y el madrileño va con un sueño a sus trabajos y a sus empeños
No sabe nada de los pequeños que le hacen barra tan pedigüeños
Por las esquinas la policía le toma el pelo a la Gran Vía
Y en las persianas españoletas le muestra el cielo a Dali las tetas
Y el jugo amargo del desengaño no te envenena, no te hace daño
si vas de cañas desenmarañas al baile oscuro con la guadaña

Alguna vez, en Madrid
voy a tener que vivir


Sydney

Recostada en el Olimpo
que aparece en el Pacífico
duerme la diosa que amaneció
cuando el aborigen se aplacó

Y asustada entre los pálpitos
de saberse una contradicción
se desborda su imaginación
y se enreda en toda su explosión

El paisaje y su voracidad
enmelenan toda la ciudad
Sydney nueva quiere recordar
y no encuentra donde aterrizar

Por la calle la conformidad
que lo verde debe examinar
una sensación de humanidad
pervertida por su despertar

Dias que pasan por la izquierda
siguiendo de cerca mi casa y mi noche,
mi fosforecencia por estar tranquilo y
robándole al parque dos o tres suspiros
Australia frondosa quiere un laberinto
pero no le basta con su buen instinto
quiere una muralla, una torre Eiffel
con su nueve once, o con su Fidel.
Recicla la talla, para darla bien
y vuelve a su sueño desde su contén
de aguas heladas, de sangre y de sal
de los buenos cuentos que puede contar.
No tiene su Duomo ni tiene un Big Ben,
pero tiene hambre y no quiere comer
le lloran los huesos y como un camaleón
me explico su tarde con esta canción
Qué se pierde entre los selfies
de bahía y de tiburón?
En el ferry nada apareció
y la Opera no oyó su voz

Las pantallas del futuro
se reflejan en lo oscuro
de esta eternidad de ayuno
que pone la piel de canguro

Sydney nueva vuelve a bostezar
distraida por su gravedad,
Sydney vieja se escucha al final
de los puentes que cruzan el mar

Y la Australia que se despertó
o la Australia que se emborrachó
con su arvo y con su rock’n roll
da lo mismo: no resiste el sol
La noche cae y se aprieta
la multitud en el hogar.
Australia con sus maletas
y nadie sabe nadar
en el medio del Pacífico….

Bella pero incomunicada la rubia mulata brava va a dormir hasta mañana

San Francisco


Si vas a San Francisco 
"with flowers in your head"
a darle dos mordiscos:
para ti y para él,
no olvides el mejunje
que te preparó ayer,
perdónale su herrumbre,
bésalo con tus pies.

Deja que se instale su contradicción
su cortocircuito y su explosión
para que el el album de tu iniciación
borres el turismo en photoshop

Tírate por sus calles,
apréndete su inglés,
olvida sus detalles
recuerda su niñez.

Desde el Golden Gate de esta canción
te buscaba el mar y te encontró,
en la niebla de tu habitación, 
repasando cuentos de Playboy
sin que quepa aquí tu confusión
sin quererte ir de su sopor.
San Francisco queda baso el sol,
aprendiéndose tu silicon,
construyéndose un país...

Los hoodies de los chicos,
sus techos de oropel,
mendigos como ricos
y ricos sin nacer
su permanente otoño
(que funciona en papel),
robots como retoños 
probándose tu piel.

Deja que se instale su contradicción
su cortocircuito y su explosión
para que el el album de tu iniciación
borres el turismo en photoshop,
si vas a San Francisco 
"with flowers in your head"
a darle dos mordiscos:
para ti y para él

Popular Posts