La equis
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Letras, música e interpretación: Alex Valdivia.
Producción: Gabriel & Alex Valdivia
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La búsqueda
Que se entiende al decir que no se pierde
en la vida, lo humano y lo silvestre
si se busca ante todo dar el paso sin maldad?
Que se encuentra al final de este camino
sino la oscuridad de lo que fuimos
y la estrella latente de lo que otro un día será?
Una piedra feliz con sentimientos,
como una cicatriz que adorna el tiempo;
llega el hombre al abismo y ya pretende levitar
Qué se ve como cierto en esta noche,
en la que atiborramos los derroches,
y estas pocas virtudes no son para derrochar?
Que puede revelar el espejismo
del mundo acelerado de uno mismo
si cabe en los pulgares pero no sabe mirar?
La partícula imberbe del otoño
no entiende el universo y se hace un moño
y una escuela y un ismo y un manual para explotar.
De querer conquistar la madrugada
pone todo de si y no pone nada
queriendo hacerle trampa y esperando una señal
Si supiera una sola estrella
la respuesta aquella
y quisiera hablar
Que no diera el monte y su fiera
por que se supiera
de su parpadear?
Yo quisiera sentir lo que se siente
ir por la vida sin dudarla siempre
y saber la parada en la que tengo que bajar.
Pero muevo un susurro en la simiente
y la sabiduría se me pierde
guardando el horizonte y confundiendo el ademán.
Una piedra feliz con sentimientos,
como una cicatriz que adorna el tiempo;
llega el hombre al abismo y ya pretende levitar.
Cuida el movimiento que te trajo aliento, forros y murallas;
unos cuelgan del abismo mientras el cinismo hace monumentos sin ganar batallas.
Guarda bien la mueca que la cara abierta es un erosionante
y otro corazón distante espera el plante de tu sensibilidad en sus instantes.
Busca lo maduro, no pierdas lo tuyo y sal a ver el dia
que otra fiesta se vacía y no hay melodía en la plusvalía de nuestra entropía
Sabe que tu cuerpo es un regalo tuerto de alguien se ríe,
ni contigo ni de ti, pero nunca te olvides del final feliz en el no sobrevives
Cuéntate una historia, no le importa a nadie si le pones gloria;
el crisol de las medallas no te da la talla cuando lo compartes con otros canallas
Arma tu talante de un estimulante hielo de artimañas.
Siéntete de otra calaña con tus musarañas y pon flores en la cicatriz de tus hazañas
Pásate la vida persiguiendo algo hasta que sea tuyo
Ignorando el apabullo y la coreografía del azar y poco a poco haz tu capullo
Hasta que sobrevivir sea una excusa torpe para dar con ello
Y si el agua llega al cuello nada siempre en dirección de aquello que te recuerde lo bello
el simio que más se atrevió
a andar en dos patas humanas
y soltando las ramas
del árbol, bajó.
Después, en la cueva, hubo frío
cuando el viento se acumuló.
Para conquistar el vacío,
descúbrase el fuego
e invéntese un dios
Se dijo: “este mundo ya es mío”
y se puso un nombre y habló
mostrando el camino del simio
al hijo del simio
cuando se asomó
por que se supiera
de su parpadear?
Yo quisiera sentir lo que se siente
ir por la vida sin dudarla siempre
y saber la parada en la que tengo que bajar.
Pero muevo un susurro en la simiente
y la sabiduría se me pierde
guardando el horizonte y confundiendo el ademán.
Una piedra feliz con sentimientos,
como una cicatriz que adorna el tiempo;
llega el hombre al abismo y ya pretende levitar.
Manual de la entropía
Cuida el movimiento que te trajo aliento, forros y murallas;
unos cuelgan del abismo mientras el cinismo hace monumentos sin ganar batallas.
Guarda bien la mueca que la cara abierta es un erosionante
y otro corazón distante espera el plante de tu sensibilidad en sus instantes.
Busca lo maduro, no pierdas lo tuyo y sal a ver el dia
que otra fiesta se vacía y no hay melodía en la plusvalía de nuestra entropía
Sabe que tu cuerpo es un regalo tuerto de alguien se ríe,
ni contigo ni de ti, pero nunca te olvides del final feliz en el no sobrevives
Cuéntate una historia, no le importa a nadie si le pones gloria;
el crisol de las medallas no te da la talla cuando lo compartes con otros canallas
Arma tu talante de un estimulante hielo de artimañas.
Siéntete de otra calaña con tus musarañas y pon flores en la cicatriz de tus hazañas
Pásate la vida persiguiendo algo hasta que sea tuyo
Ignorando el apabullo y la coreografía del azar y poco a poco haz tu capullo
Hasta que sobrevivir sea una excusa torpe para dar con ello
Y si el agua llega al cuello nada siempre en dirección de aquello que te recuerde lo bello
Preceptos básicos del tesoro
Primero alcanzó la manzana,el simio que más se atrevió
a andar en dos patas humanas
y soltando las ramas
del árbol, bajó.
Después, en la cueva, hubo frío
cuando el viento se acumuló.
Para conquistar el vacío,
descúbrase el fuego
e invéntese un dios
Se dijo: “este mundo ya es mío”
y se puso un nombre y habló
mostrando el camino del simio
al hijo del simio
cuando se asomó
Más tarde, llegada la piedra
y la toga, el cuerpo falló.
Dejó de buscar las respuestas
luciendo preguntas
y alzando la voz.
La muerte le dió un microscopio,
la vida se lo arrebató.
Queriéndole un orden a todo
se armó de motivos
y se abalanzó
A perfeccionar un bagaje
de códigos y una razón
para darle un fin a su viaje
Pensó en un tesoro
y allá lo enterró
El simio no quiso ser simio
cuando al animal rebasó
Le hizo la guerra a sus hijos
borrando el camino
y ocultando el florón
Mas lo compartido en la cueva
vendría a cobrar su porción:
El hombre no olvida su escuela
ni aunque el simio quiera
ignorar la lección.
Se dijo: “el mundo es mi herramienta”
y se adivinó grandulón
mostrándole la incongruencia
al hijo del simio
cuando se asomó
guarde sus instintos en su laberinto
y haga su domingo un pretender activo
Se hace adictivo
parecer distinto, pero le hago ahínco
en saberse extinto y lucir festivo
En colectivo calme sus marañas
para hacerse el vivo
Para dar la talla
Cuelgue sus medallas entre las toallas
Donde seca la sangre de sus batallas
Cuando se calla
Toda la rondalla vuelve a la muralla
Donde sus agallas de repente estallan
Y en la pantalla no hay sobrevivientes
Que le den la talla
A ese muro, a ese dolor, a ese fallo de su corazón
a esa sed de insurrección, a esa mueca que guarda su voz,
a esa vuelta que marea a los demás con uña y diente
dele el frente
y sépase preso de su peso, que todos por eso debemos pasar
y a la luz de sus ideas deficientes, no lamente sus septiembres,
que esta vida se pasea siempre de la cara hasta la cruz
Para abrir caminos
saque bien el filo y se lo compilo
para sus pupilos, para sus vecinos
Mapas y espinos
llenos de sigilo enrollando el hilo
a sus pies tranquilos de árbol blanquecino
dientes ferinos tenga su cuchillo
para abrir caminos
La mala saña te ataca, te busca al pie del delito y si te encuentra curioso te etiqueta,
te empaqueta.
Eso nos pasa a los dos
Dejó de buscar las respuestas
luciendo preguntas
y alzando la voz.
La muerte le dió un microscopio,
la vida se lo arrebató.
Queriéndole un orden a todo
se armó de motivos
y se abalanzó
A perfeccionar un bagaje
de códigos y una razón
para darle un fin a su viaje
Pensó en un tesoro
y allá lo enterró
El simio no quiso ser simio
cuando al animal rebasó
Le hizo la guerra a sus hijos
borrando el camino
y ocultando el florón
Mas lo compartido en la cueva
vendría a cobrar su porción:
El hombre no olvida su escuela
ni aunque el simio quiera
ignorar la lección.
Se dijo: “el mundo es mi herramienta”
y se adivinó grandulón
mostrándole la incongruencia
al hijo del simio
cuando se asomó
Instrucciones para hacerse el vivo
Para hacerse el vivoguarde sus instintos en su laberinto
y haga su domingo un pretender activo
Se hace adictivo
parecer distinto, pero le hago ahínco
en saberse extinto y lucir festivo
En colectivo calme sus marañas
para hacerse el vivo
Para dar la talla
Cuelgue sus medallas entre las toallas
Donde seca la sangre de sus batallas
Cuando se calla
Toda la rondalla vuelve a la muralla
Donde sus agallas de repente estallan
Y en la pantalla no hay sobrevivientes
Que le den la talla
A ese muro, a ese dolor, a ese fallo de su corazón
a esa sed de insurrección, a esa mueca que guarda su voz,
a esa vuelta que marea a los demás con uña y diente
dele el frente
y sépase preso de su peso, que todos por eso debemos pasar
y a la luz de sus ideas deficientes, no lamente sus septiembres,
que esta vida se pasea siempre de la cara hasta la cruz
Para abrir caminos
saque bien el filo y se lo compilo
para sus pupilos, para sus vecinos
Mapas y espinos
llenos de sigilo enrollando el hilo
a sus pies tranquilos de árbol blanquecino
dientes ferinos tenga su cuchillo
para abrir caminos
Directrices de todo motín
La mala saña te ataca, te busca al pie del delito y si te encuentra curioso te etiqueta,
te empaqueta.
Eso nos pasa a los dos
Hay que saberse inclemente.
Hay que apretar bien los dientes y seguirle el juego al fuero,
sedoso,
violento.
Hay que amoldar las pisadas al zig-zag de la escalera,
fingir que nunca se quiere por las noches,
besar a los enemigos.
Hay que aprender los secretos del amor a las sillas eléctricas,
a la horca,
a la última cena.
Hay que pasar por los juicios
como los camellos por el ojo de las agujas
y el pajar.
Hay que saber qué se dice,
cómo se dice,
cuándo se dice,
a quién se le dice
lo que se dice.
Hay que saber qué se ha dicho.
Eso nos pasa a los dos.
Hay que aceptar los caminos.
No es suficiente estar vivo sintiendo que hay que vivir.
Despegar a los héroes de las paredes del cuarto.
Pintarlas de blanco,
o de amarillo,
o no pintarlas:
dejar los huecos desnudos a la vista de todos.
- flacos,
profundos,
insuficientes -
y proclamar tirando la puerta adolescente,
con la furia bella de los pies cansados,
que se ha hecho algo,
que se ha querido algo,
que se ha sido algo,
aunque no haya bastado para derrocar
aun con malas guías,
con malas sañas,
que se ha buscado un tesoro
un fin humano.
Eso nos pasa a los dos.
llenando huecos, vendiendo su horario y sabiéndose cruel
Y el universo le avisa que un ramo luces quiza le resulte mayor
pero el trabajo le amputa los nervios y apaga su sol
Monta su nave, navega el buen día y saluda al pasar
entre los dientes mastica la estría sabiéndose mal.
Qué gentileza al final del camino, un disparo a la tuerca que aprieta el hogar!
Libre del mundo y preso del alba pretende olvidar
Ya pasó la primavera
y el desfile, ya pasó
Ya pasó la noche entera recogiéndose la voz
Pero al pie de la escalera
ya su pie le regaló,
extrañando ser la fiera a que teme otro señor
Mientras cuenta los motivos
se convence de que hoy
no ha encontrado los caminos,
que después está el destino,
que mañana mete el gol
Y el candado entre las cejas
va perdiendo autoridad
ya no busca moraleja,
en lo negro de la oveja
que debe sacrificar
Ya cerró todas las puertas,
la camisa ya rompió.
Ya perdió muchas apuestas y no quiere fiador.
Hay que apretar bien los dientes y seguirle el juego al fuero,
sedoso,
violento.
Hay que amoldar las pisadas al zig-zag de la escalera,
fingir que nunca se quiere por las noches,
besar a los enemigos.
Hay que aprender los secretos del amor a las sillas eléctricas,
a la horca,
a la última cena.
Hay que pasar por los juicios
como los camellos por el ojo de las agujas
y el pajar.
Hay que saber qué se dice,
cómo se dice,
cuándo se dice,
a quién se le dice
lo que se dice.
Hay que saber qué se ha dicho.
Eso nos pasa a los dos.
Hay que aceptar los caminos.
No es suficiente estar vivo sintiendo que hay que vivir.
Despegar a los héroes de las paredes del cuarto.
Pintarlas de blanco,
o de amarillo,
o no pintarlas:
dejar los huecos desnudos a la vista de todos.
- flacos,
profundos,
insuficientes -
y proclamar tirando la puerta adolescente,
con la furia bella de los pies cansados,
que se ha hecho algo,
que se ha querido algo,
que se ha sido algo,
aunque no haya bastado para derrocar
aun con malas guías,
con malas sañas,
que se ha buscado un tesoro
un fin humano.
Eso nos pasa a los dos.
Guía para exabruptos
Frente a la aurora se busca y se inventa el hombre su papelllenando huecos, vendiendo su horario y sabiéndose cruel
Y el universo le avisa que un ramo luces quiza le resulte mayor
pero el trabajo le amputa los nervios y apaga su sol
Monta su nave, navega el buen día y saluda al pasar
entre los dientes mastica la estría sabiéndose mal.
Qué gentileza al final del camino, un disparo a la tuerca que aprieta el hogar!
Libre del mundo y preso del alba pretende olvidar
Ya pasó la primavera
y el desfile, ya pasó
Ya pasó la noche entera recogiéndose la voz
Pero al pie de la escalera
ya su pie le regaló,
extrañando ser la fiera a que teme otro señor
Mientras cuenta los motivos
se convence de que hoy
no ha encontrado los caminos,
que después está el destino,
que mañana mete el gol
Y el candado entre las cejas
va perdiendo autoridad
ya no busca moraleja,
en lo negro de la oveja
que debe sacrificar
Ya cerró todas las puertas,
la camisa ya rompió.
Ya perdió muchas apuestas y no quiere fiador.
Ya un murmullo bambolea
y no distingue su voz.
Si no gana la pelea, que la pierda con fervor
Va rompiéndose la llave
el candado se hace flor.
Recordando los ultrajes
se desborda su fogaje,
se revela el agresor
y no distingue su voz.
Si no gana la pelea, que la pierda con fervor
Va rompiéndose la llave
el candado se hace flor.
Recordando los ultrajes
se desborda su fogaje,
se revela el agresor
Y gritarle a los vecinos
cómo se vive mejor
sin lograr tener el tino
de encontrarse en el camino
cómo se vive mejor
sin lograr tener el tino
de encontrarse en el camino
de la presa al cazador
Frente a la aurora se busca y se inventa el hombre su papel
Adelante, señor
venga a ver el espejo de un dios,
que en realidad es mil cosas mas
si parece mentira no vuelva a mirar
Desate su ambición
este circo no tiene opinión.
Tiene un imán con que al final
al tesoro escondido le de por llorar
No se asuste si escucha el motor
del andamio que aguanta el palco
Viene a bien mantener la ilusión
y la contradicción
El precio de admisión
es saberse perdido y buscar
ley cardinal: nunca encontrar
No termina el camino espectacular
A cambio le ofrecemos dolor
en dosis casi imperceptibles
Las cadenas del niño interior
y hombre que habitó
Venga a ver el espejo, señor
con la cara que más le guste
Quédese a acicalar el tumor
de la contradicción
Que hablen las paredes que arman las siluetas viejas de tu barrio,
que la plaza nazca sobre las iglesias y se cante el gol
y la tierra gire sobre las cabezas y los amuletos.
Que se deje seducir la ciencia por tu corazón.
Que los sortilegios te salven del cielo,
que los pararrayos guarden tus regalos
y te salga el sol por donde estoy
escribiendo esta canción
Frente a la aurora se busca y se inventa el hombre su papel
Reglas de abordo
Adelante, señor
venga a ver el espejo de un dios,
que en realidad es mil cosas mas
si parece mentira no vuelva a mirar
Desate su ambición
este circo no tiene opinión.
Tiene un imán con que al final
al tesoro escondido le de por llorar
No se asuste si escucha el motor
del andamio que aguanta el palco
Viene a bien mantener la ilusión
y la contradicción
El precio de admisión
es saberse perdido y buscar
ley cardinal: nunca encontrar
No termina el camino espectacular
A cambio le ofrecemos dolor
en dosis casi imperceptibles
Las cadenas del niño interior
y hombre que habitó
Venga a ver el espejo, señor
con la cara que más le guste
Quédese a acicalar el tumor
de la contradicción
El mapa
Que hablen las paredes que arman las siluetas viejas de tu barrio,
que la plaza nazca sobre las iglesias y se cante el gol
y la tierra gire sobre las cabezas y los amuletos.
Que se deje seducir la ciencia por tu corazón.
Que los sortilegios te salven del cielo,
que los pararrayos guarden tus regalos
y te salga el sol por donde estoy
escribiendo esta canción
Que los días que prometen los baúles de tu recompensa
no roben el banco, no den en el blanco, no te vean pasar
que amanezcas sin resaca y bien al lado del significado
que te trajo anoche sin darte su nombre ni dejarte hablar
que te sobre el aire cuando el cuerpo baile
que vuelvas a casa con trofeos
y se pegue el sol al refrigerador
al oír esta canción
Que ha sido triste cuando ha hecho daño
pero ahora ríe de ti si estás pensándolo
si estás ahogando tus aguinaldos
en el mar de otra canción
Que dejen abierta la barra más cierta en la que estás tomando
que te cante el coro la banda sonora de tu soledad
que te de un impulso mágico exagerado tu zapato
no roben el banco, no den en el blanco, no te vean pasar
que amanezcas sin resaca y bien al lado del significado
que te trajo anoche sin darte su nombre ni dejarte hablar
que te sobre el aire cuando el cuerpo baile
que vuelvas a casa con trofeos
y se pegue el sol al refrigerador
al oír esta canción
Que ha sido triste cuando ha hecho daño
pero ahora ríe de ti si estás pensándolo
si estás ahogando tus aguinaldos
en el mar de otra canción
Que dejen abierta la barra más cierta en la que estás tomando
que te cante el coro la banda sonora de tu soledad
que te de un impulso mágico exagerado tu zapato
y llegues al tope de donde has pensado que debes llegar
que estas calles buenas rompan tus cadenas
que cuentes los pasos a la equis
y te haga desenterrar la gran lección
el mapa de esta canción
que estas calles buenas rompan tus cadenas
que cuentes los pasos a la equis
y te haga desenterrar la gran lección
el mapa de esta canción